EnTRADA DESTACADA

¡LA SABIDURÍA INSONDABLE DE DIOS!

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  Ester 2:16-17 16-Así fue llevada Ester al rey Asuero, a su casa real, en el mes décimo, que es el mes de Te b é t , en el año séptimo de su reinado. 17- Y el rey amó a Ester más que a todas las mujeres, y ella halló gracia y favor en sus ojos más que todas las demás vírgenes; y puso la corona real sobre su cabeza , y la hizo reina en lugar de Vasti . ¡Dios es magnifico! Y ¡Su Sabiduría es Insondable! ¡Aleluya! La sabiduría de Dios es profunda, no la podemos alcanzar, no la podemos comprender. Porque la Sabiduría de Dios no opera como nosotros operamos en la sabiduría humana, y aunque nosotros sepamos que hay una sabiduría humana, terrenal y diabólica ( Santiago 3:15 ) todavía nos cuesta desprendernos de los residuos de la sabiduría humana y natural y tomar la sabiduría, o conocer, o comprender o ir hacia esa sabiduría insondable,  profunda, una sabiduría incomprensible, que viene del cielo a la tierra, que viene del cielo a nosotros, porque no cae en la tierra, v...

CON OLOR A PACIENCIA

 

La paciencia nos hace Orar, y la Oración nos da paciencia.

 

En la espera lo que más necesitamos es la Paciencia, y a fin de que la Paciencia de Dios se manifieste necesitamos de una vida de oración ferviente.

En Jesús vimos la vida de Oración ferviente por la cual obtuvo la Paciencia perfecta, la que viene de Dios.

Aquella que mora en el Padre, cuya paciencia nos guía al arrepentimiento.

Romanos 2: 4- ¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento?


Santiago 5:7a, dice “Por tanto tened hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor.

¡Cuán larga debe ser nuestra paciencia y hasta cuando!

Esa paciencia evidentemente es celestial, nos es dada de Dios, porque su objetivo es para poder permanecer en la Espera de su Venida y Hasta su venida

El Espíritu Santo a través del Apostol Santiago nos muestra cómo hasta un campesino puede llenarse de paciencia para esperar ver la cosecha de sus sembrados, aguardando con paciencia las lluvias tempranas como tardías.

Es decir necesita paciencia hasta para que los factores que actuarán sobre lo que él sembró, intervengan.

Eso es sabiduría dentro de la espera.

No podemos plantar una semilla y ya esperar el fruto ignorando, no entendiendo los procesos y factores, por ejemplo la lluvia y el sol, que se necesitan para que esa semilla se transforme o nos dé el fruto.

La oración nos dará entendimiento para esperar, y ello producirá paciencia.

El justo necesita Paciencia.

La espera no es buscada por el justo, es dada por Dios. 

Dios nos dice: - ¿Lo quieres? ¡Es tuyo, pero espera!

Así que vemos que hay una certeza, y una seguridad:

Si planto una semilla, dará un fruto, pero ¡habrá una espera y necesitaré paciencia!!


La falta de oración me impedirá tener la paciencia adecuada para cada espera.

 Hay esperas cortas y hay esperas largas.

Cuando venimos de recibir respuestas, unas tras de otras, estamos muy fuertes en la Fe, pero seguramente habremos quedados debilitados en lo que es esa hermosa virtud cristiana: la paciencia.


Esa paciencia no es la de la madre, no es la del campesino, no es la del hombre común, esa paciencia es la que nos mencionan los ejemplos de los siguientes versículos.

Hay madres que podemos tener una paciencia admirable pero sucumbimos ante la espera de la transformación espiritual de nuestro esposo, hay padres que pueden tener la paciencia especial y amorosa para con sus hijos pero no logran esperar la restauración de su matrimonio.

Para ello se necesita esperar con paciencia, y aguardar pacientemente la intervención de los otros factores que intervendrán en el fruto que anhelamos ver en ellos, y esos factores evitan que seamos nosotros los que intentemos apurar el proceso, deteniéndonos y llevándonos a más oración o… a la amargura.

La Paciencia en la espera, solo puede ser desarrollada con la Oración.

Así Dios nos da ejemplos de justos que vivieron en una larga espera, y soportaron con paciencia el sufrimiento que esta le ocasionó.

Porque la espera trae sufrimiento. 

Si esperar ver lo que ya sabemos que es nuestro, que nos dio el Señor, y no poder tenerlo ¡Ya! eso nos da dolor, y por causa de esa espera sufrimos. 

Los profetas soportaron con mucho sufrimiento la espera de ver aquello que Dios les decía de profetizar. 

También nos da el ejemplo de Job quien era tan bendecido y feliz con su familia que parecía no tener que esperar más nada, tenía una excelente relación con su Creador, con su esposa, con sus hijos, sus criados, sus amigos, y su prójimo pero tuvo una gran prueba, la que debió atravesar, y con ella estaba la espera.

 Así que Job tuvo que alcanzar la Paciencia, la cual no se alcanza con la queja, ni con la amargura, ni el resentimiento, ni con nuestra ayuda humana.

Job 1:21-22 y 2:11 vemos a un Job preparado para todo, firme y fuerte espiritualmente, pero en Job 3:1

Job comienza a reaccionar sujeto a lo que sentía desde ese mismo momento a causa de los amigos que vinieron a “consolarlo”, más bien fueron los factores que tenían que intervenir para que el fruto de esa gran prueba se manifestara en la vida de Job, y para ello Job iba a necesitar mucha paciencia para llegar hasta el fin de esa prueba.

Job 5:2 Entregarse a la amargura o a la pasión, es una necedad que lleva a la muerte

En la espera podemos llenarnos de amargura o de pasiones, en vez de entregarnos a la oración para obtener la paciencia que necesitamos.

Santiago 5: 17 nos dice del profeta Elías, como un ejemplo, fue sujeto a pasiones, a desbordamientos emocionales pero pudo sujetar su alma por la oración ferviente, y cerrar los cielos por tres años y medio, así como pudo luego abrirlos.

La espera necesita la Paciencia.

Pero así como la amargura y las pasiones pueden afectarla, también la queja.

Santiago 5: 9 -  Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta.

La espera puede hacernos entregar a la queja, uno de los otros, y esto aunque estemos esperando nos descalificara ante el Juez que ya está a la puerta. 

Esta muy cerca ya. 

No quiere decir que no lleguemos sino que lleguemos pero sin la condición apta.

Dios nos respondió desde el primer momento que dispusimos nuestro corazón a creer en él, así que la respuesta llegará, el cumplimiento de lo que él nos haya prometido llegará, pero nosotros debemos estar llenos de Olor a Paciencia, la paciencia trae mansedumbre y templanza a nuestras vidas, porque eso es el fruto o la señal de cuánto del Espíritu de Dios hay en nosotros, que no estaremos vacíos o a medio llenar sino llenos.

Efesios 4: 30 y 31 Efesios 5: 18b 19

Gálatas 5: 22 y 23

22 -Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23- mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley


Sin duda el fruto del Espíritu Santo en nosotros nos dará la Paciencia de Dios para la espera de su regreso, pero también la paciencia para vivir entre los santos y como santos, mientras esperamos de Él, las respuestas a nuestras oraciones, la cosecha de nuestras siembras, como los cumplimientos de sus palabras proféticas.


Paciencia del Griego MAKROTHYMIA: significa: longanimidad, apacibilidad, indulgencia.

No hay espíritu de rencor, es un equilibrio de todos los temperamentos y pasiones, completamente opuesto al enojo.

Cuando hay paciencia hay  constancia,  cuando hay Paciencia hay firmeza y perseverancia, el que es paciente es tolerante, clemente e indulgente pero todo por el fruto y trabajo del poderoso Espíritu Santo, ¡aleluya!

Oremos: 

Amado Padre, estamos en una Espera continua, no podemos vivir en la Fe de tu amado Hijos Jesús sin esperar. La fe nos lleva a esperar, por eso te pedimos nos de ese fruto tan necesario en nosotros hoy: la Paciencia de Dios, no del hombre, sino tuya. La recibimos por la fe, Espíritu Santo, ayúdanos a manifestar ese fruto, a usarlo, a gustarlo y a darlo hasta ver la respuesta de lo que estamos esperando. En el nombre de Jesús, ¡Amén!

Dios te bendiga

Pst Sara Olguín.





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